Máquinas asombrosas y asombrosas personas

Ayer vi un estupendo documental en la 2. Llevo un rato tratando de localizarlo para compartirlo aquí, pero no consigo averiguar ni siquiera el título. Lo atribuiré a mi propia torpeza y no a que los programas asquerosos sí que se localizan en un solo clic. Me voy a calmar, que me sesgo.

La Máquina de Anticitera

El documental en cuestión cuenta cómo un equipo internacional e interdisciplinar desentraña los misterios de la Máquina de Anticitera. El resultado de sus investigaciones es asombroso, pero lo es aún más el mecanismo en sí, teniendo en cuenta su origen y antigüedad. Y para la sedienta aprendiza que llevo dentro, el proceso de la investigación es apasionante. 

A principios del siglo pasado se descubrieron los restos de un naufragio romano en las inmediaciones de la isla griega de Anticitera. Entre los hallazgos se encontraba la llamada Máquina, que se puede visitar en el Museo Arqueológico Nacional de Atenas. (Vamos, creo que aún se puede, no sé si después del rescate del país esta afirmación sigue siendo verdadera).

En el documental se cuenta todo el proceso de la investigación: Cómo se las ingeniaron para penetrar los misterios del aparato con sofisticadas técnicas de rayos X y tomografía computerizada. El software que la compañía HP diseñó para "ver" mejor los detalles de la superficie. La arqueóloga del museo que rescató unas piececillas diminutas que en principio no estaban relacionadas con la Máquina y se vio que eran parte del mismo puzzle. Los historiadores, en contacto a través de un foro de internet, que se dieron cuenta de que unos símbolos representaban meses que sólo pertenecían al calendario de Siracusa. (Me recrearé en esto: pudieron darse cuenta de ello porque ya lo sabían previamente...) El matemático que se obsesionó con el número de dientes que tenía cada engranaje. El señor que se parece al Doc de BTTF, que fabricó a mano un modelo de la Máquina. En fin, un montón de gente trabajando en equipo para que los demás lo tengamos más fácil a la hora de comprender y maravillarnos.

Un puzzle griego de 82 piezas

Por cierto, en esta página que enlazo se puede jugar con el software de HP. Se pincha en la imagen que quieras ver con más detalle y luego simplemente desplazando el ratón con el botón izquiero pulsado, vas moviendo una luz virtual sobre el objeto. Yo he pasado un rato muy entretenida. 

Lo que averiguaron es que la Máquina de Anticitera es un ordenador construido para predecir eclipses, calcular ciclos astronómicos, las fases de la luna, y es calendario solar y lunar. Reproduce los movimientos de los astros con absoluta precisión, con sus órbitas elípticas, utilizando para ello mecanismos diferenciales, que no se volvieron a utilizar en Europa hasta por lo menos el siglo XVI. 

Los eclipses eran portadores de malos augurios, o sea, eran utilizados por los gobernantes para infundir miedo en la población y así poder hacer las cosas un poco más arbitrariamente, con tal de "proteger al pueblo" de las desgracias sin que nadie rechistara. En la fecha en la que se iba a producir el eclipse, el rey abdicaba legalmente en favor de un nuevo rey escogido curiosamente de entre los criminales y personas non-gratas que molestaban en el régimen. En el reinado del nuevo soberano, que no pintaba nada, el auténtico poder aprovechaba para perpetrar todos los desmanes que luego atribuían a los malos augurios astronómicos, y pasado el "peligro" se asesinaba al rey malote, reponiendo en el trono al rey original. Para el "rey de paja" se cumplían efectivamente los malos augurios, reforzando así la creencia. 

Todo el conocimiento que hizo falta para crear una máquina tan precisa como la de Anticitera se perdió durante siglos. Hasta tal punto hoy en día nos parece increíblemente asombroso el nivel que alcanzó el pensamiento griego, que algunas personas están convencidas de que la Máquina es un "Oopart", que es como llaman los buscadores de misterios a los objetos que no parecen corresponder con sus épocas. (Out of place artifacts, objetos fuera de lugar.) 

he-he-he...
(autor de la viñeta: Jaimico Rojas)

Tras ver el documental, discutí sobre el tema con el enemigo que tengo en casa, que no se cree que las personas del siglo II antes de Cristo pudieran haber hecho un mecanismo como este. Mi adorada némesis se basa en la asombrosa  precisión de los cálculos necesarios para el funcionamiento de la Máquina, que incluyen números de nueve decimales. Opina que el manejo de esa clase de números solo es posible si se posee tecnología digital. 

Cuando le pregunté si estaba sugiriendo que los constructores de la máquina tuvieron algún tipo de "ayuda", se le pusieron los ojitos de ufólogo y acabamos discutiendo en serio. Es de los que no se terminan de creer que los egipcios sean los auténticos autores de las pirámides. Se ve que este querido enemigo mío no tiene mucha confianza en su propia especie.

Yo no estoy de acuerdo con los "íkeres". Precisamente lo que a mí me conmueve y me sacude las meninges es el convencimiento de que fue la especie humana, mi propia especie, la que logró esas grandes hazañas intelectuales y técnicas y la que aún lo hace. Me aferro a esa idea porque significa que si aprovechamos bien  nuestro cerebro, no hay reto lo suficientemente grande, no hay dificultades que no podamos superar.